Remedios con aromaterapia para la alergia estacional (Fiebre del Heno)

La fiebre del heno, también llamada alergia estacional o rinitis alérgica, provoca signos y síntomas similares a los del resfriado tales como secreción nasal, picazón en los ojos, congestión, estornudos y presión en los senos paranasales. Pero a diferencia de un resfriado, la fiebre del heno no es causada por un virus sino por una respuesta alérgica a los alérgenos del exterior o del interior, como el polen, los ácaros del polvo o pequeñas partículas de piel y saliva que expulsan los gatos, perros y otros animales con pelo o plumas (caspa de mascotas). Además de hacerte sentir indefenso, la fiebre del heno puede afectar a tu desempeño en el trabajo o la escuela y, en general, interferir con tu vida. Pero no tienes que aguantar síntomas molesto, puedes aprender a evitar los desencadenantes y encontrar el tratamiento adecuado.

¿Qué sintomatología cursa la alergia estacional?

Los signos y síntomas de la fiebre del heno pueden incluir:

• Goteo nasal y congestión nasal
• Ojos llorosos, con picazón y enrojecidos (conjuntivitis alérgica)
• Estornudos
• Tos
• Comezón en la nariz, el cielo de la boca o la garganta
• Piel alrededor de los ojos hinchada y de color azul (ojos morados alérgicos)
• Goteo postnasal
• Fatiga

¿Qué factores son los que lo provocan?

Factores estacionales

Los signos y síntomas de la fiebre del heno pueden comenzar o empeorar en una época particular del año. Los disparadores incluyen:

• Polen de árboles, que es común a principios de la primavera.
• Polen de maleza, que es común a fines de la primavera y el verano hasta septiembre¡.
• Polen de gramíneas, común en mayo y junio.
• Los ácaros del polvo, las cucarachas y la caspa de las mascotas pueden ser molestos durante
  todo el año (perennes). Los síntomas causados por la caspa pueden empeorar en invierno,
  cuando las casas están cerradas.
• Las esporas de hongos y mohos de interior y exterior se consideran tanto estacionales como
  perennes.

Se considera que a partir de 50 granos de polen por metro cúbico pueden producirse manifestaciones de síntomas alérgicos.

Los pólenes que más frecuentemente causan la rinitis alérgica son abedul, álamo, olmo, roble, olivo, chopo, gramíneas y arbustos.

El polen de la hierba (aparece preferentemente en verano) es más propenso a causar alergia porque pesa muy poco y es fácilmente transportado largas distancias por el viento. En cambio, el polen de la mayor parte de los árboles (aparece preferentemente en primavera) es más pesado, sedimenta con rapidez y hay que estar bastante cerca del árbol para inhalarlo.

Fiebre del Heno vs. Resfriado común

Los signos y síntomas pueden ser similares, por lo que puede ser difícil diferenciar:

Causas

Cuando aparece la fiebre del heno, tu sistema inmunológico identifica una sustancia inofensiva en el aire como dañina. Luego, tu sistema inmunológico produce anticuerpos contra esta sustancia inofensiva, de modo que la próxima vez que entres en contacto con la sustancia, estos anticuerpos le indicarán a tu sistema inmunitario que libere sustancias químicas como la histamina en el torrente sanguíneo, lo que provoca una reacción que conduce a los signos y síntomas de la fiebre del heno.

Factores de riesgo

• Tener otras alergias o asma
• Tener dermatitis atópica (eczema)
• Tener un pariente consanguíneo (como un padre o un hermano) con alergias o asma
• Vivir o trabajar en un ambiente que te expone constantemente a alérgenos  (como caspa de animales o ácaros del polvo)
• Tener una madre o familiar con el que conviviste que fumó durante tu primer año de vida

Complicaciones

• Calidad de vida reducida. La fiebre del heno puede interferir con el disfrute de las actividades y bajar tu rendimiento en el trabajo, estudios y actividades diarias. Para muchas personas, los síntomas de la fiebre del heno provocan ausencias en el trabajo o la escuela.
• Dormir mal. Los síntomas de la fiebre del heno pueden dificultar dormirse o causar despertares durante el sueño, lo que puede provocar fatiga y una sensación general de malestar general.
• Empeoramiento del asma. La fiebre del heno puede empeorar los signos y síntomas del asma, como tos y sibilancias.
• Sinusitis. La congestión prolongada de los senos paranasales debido a la fiebre del heno puede aumentar la susceptibilidad a la sinusitis, una infección o inflamación de la membrana que recubre los senos paranasales.
• Infección en el oído. En los niños, la fiebre del heno a menudo es un factor en la infección del oído medio (otitis media).

Prevención

No hay forma de evitar la fiebre del heno. Si tienes fiebre del heno, lo mejor que puede hacer es disminuir tu exposición a los alérgenos que causan los síntomas. Toma medicamentos para la alergia antes de exponerte a los alérgenos, según las indicaciones del médico. Refuerza tu sistema inmune.

Cómo la aromaterapia puede ayudar

Tratamientos alternativos

Se han utilizado varios remedios naturales para tratar los síntomas de la fiebre del heno. La miel es un remedio natural que se ha sugerido para la fiebre del heno, ya que se cree que el polen de abeja en la miel podría desensibilizarnos frente a otros pólenes. La ingesta diaria de miel de buena calidad podría reducir significativamente los síntomas de la fiebre del heno. Usa miel local del área donde vives para obtener mejores resultados. La Vitamina C, la infusión de manzanilla y el ajo mejoran también los síntomas. La acupuntura y la reflexología también pueden ser útiles.

La experiencia ha demostrado que la aplicación adecuada de los aceites esenciales puede ayudar a aliviar los síntomas de la alergia. No hay una sola sinergia correcta que funcione para todos. La mejor mezcla o sinergia es siempre la personalizada, y es tanto un arte como una ciencia y sobre todo, siempre se debe considerar a la persona para quien se formula la mezcla. También hay que tener en cuenta las preferencias personales de aromas y el método de aplicación preferido.

Algunos métodos de aplicación a considerar que podrían ser de ayuda serían:

• Inhaladores personales
• Compresas calientes.
• Difusores. Ideal para ayudar a prevenir la propagación de patógenos en el aire.
• Inhalaciones de vapor. Muy útil para los senos paranasales obstruidos y los problemas de las vías respiratorias superiores. Baños. Relajarse en un baño puede ayudar a calmar los músculos cansados y doloridos y ayudar a despejar los senos paranasales obstruidos. Ten en cuenta que los aceites esenciales y el agua no se mezclan por lo que es necesario diluir los aceites en un aceite vegetal, y esta mezcla se puede añadir a sal del Himalaya, de Epsom, etc. También se puede utilizar un solubilizante o añadir los aceites a un gel neutro.
• Mezclas aromáticas de aplicación tópica.
• Duchas calientes.

Como siempre tenemos en cuenta a la persona y los síntomas que experimenta cuando creamos sus mezclas.

Aceites esenciales más útiles

Los aceites más útiles para la fiebre del heno son aquellos que combinan una acción antialérgica o antihistamínica con propiedades balsámicas y antiinflamatorias. También son excelentes los aceites con propiedades expectorantes, astringentes e inmunoestimulantes. Algunos de los aceites a considerar incluyen:

• Bergamota (Citrus bergamia) – tiene propiedades antiespasmódicas y expectorantes.
• Manzanilla alemana (Matricaria recutita): tiene propiedades antiinflamatorias, antialérgicas y descongestivas.
• Clavo especia (Syrygium aromaticum): propiedades antibacterianas, antivirales e inmunoestimulantes. Considerado como un potente antibacteriano de amplio espectro.
• Eucalipto (Eucalyptus radiata): Propiedades antibacterianas, antiinfecciosas, antiinflamatorias, antivirales, expectorantes, antitusígenas, inmunoestimulantes.
• Incienso (Boswellia carterii) – tiene propiedades expectorantes y mucolíticas.
• Helichrysum (Helichrysum italicum): Propiedades anticatarral, mucolítica, expectorante.
• Lavanda (Lavandula angustifolia): Propiedades antiinflamatorias, analgésicas. Relaja y facilita la respiración.
• Mirto (Myrtus communis): Propiedades anticatarral, expectorante, descongestionante.
• Niaouli (Melaleuca quinquenervia): Propiedades antiinfecciosas, antibacterianas, antivirales, antiinflamatorias, anticatarral y expectorante.
• Menta (Mentha x piperita): Descongestionante y tiene un efecto antiséptico sobre la membrana mucosa.
• Ravintsara (Cinnamomum camphora ct. 1,8 cineol) – tiene propiedades antivirales e inmunoestimulantes.
• Rosa (Rosa x damascena): propiedades antiinflamatorias, antiespasmódicas.
• Romero (Rosmarinus officinalis) : Útil para todas las infecciones respiratorias. El quimiotipo Cineol es expectorante y tiene propiedades mucolíticas, considerado especialmente adecuado para condiciones catarrales. El quimiotipo alcanfor tiene propiedades mucolíticas. El quimiotipo verbenona tiene propiedades anticatarrales, mucolíticas y expectorantes. Especialmente eficaz como mucolítico.
• Tanaceto (Tanacetum annum): antihistamínico, alivia la inflamación, propiedades analgésicas.
• Árbol de té (Melaleuca alternifolia): tiene propiedades antiinflamatorias e inmunoestimulantes.
• Tomillo (thymus vulgaris ct. linalol y ct. geraniol) – tiene propiedades inmunoestimulantes, carminativas y expectorantes.
• Milenrama (Archillea millefolium) – tiene propiedades antiinflamatorias, carminativas y expectorantes.

Como siempre, los aceites esenciales en otras vías que no sean inhaladas, se deben usar con previa dilución en un aceite portador.

Al aplicar los aceites esenciales por vía tópica, puedes elegir entre usar un ungüento, una crema, una loción, un aceite corporal o un gel. La velocidad a la que los aceites esenciales pueden absorberse a través de la piel será más rápida o más lenta según el tipo de vehículo que elijas.

Hidrolatos para la Fiebre del Heno

• 100 ml Manzanilla azul (Matricaria recutita)
• 100 ml Menta piperita (Mentha piperita)
• 100 ml Tomillo (Thymus vulgaris)

Añadir 1 cucharada a 1,5 litros de agua y beber durante el día. Comienza 2 a 3 semanas antes de la aparición de los primeros síntomas y durante la temporada.
Hidrolatos Antialérgicos: Manzanilla Azul (Matricaria recutita); mirto (Myrtus communis); manzanilla romana (Chamaemelum nobile); Menta (Mentha piperita o Mentha arvensis).

Mezclas de aromaterapia

Sinergia Maestra Fiebre del heno 1

2 gotas niaouli (Melaleuca quinquenervia)
3 gotas manzanilla azul (Chamomile recutita)
2 gotas tomillo vulgar qt. linalol (Thymus vulgaris qt. linalol)
2 gotas menta piperita (Mentha piperita)

Usar en inhalador personal, añadir unas gotas al baño, difusor, spray o diluir al 3% en jojoba
para uso tópico.

Sinergia Maestra Fiebre del heno 2

2 gotas eucalipto radiata (Eucalyptus radiata)
2 gotas mirto (Mirtus comunis)
2 gotas limón (Citrus lemon)

Usar en inhalador, spray ambiental, difusor o diluir en un aceite portador al 3% máximo y
aplicar tópicamente.

Sinergia Maestra Fiebre del heno 3

2 gotas lavanda
2 gotas tanaceto
2 gotas manzanilla alemana
Usar en inhalador, spray ambiental, difusor o diluir en un aceite portador al 3% máximo y
aplicar tópicamente.

Mezcla Masaje 

2 gotas manzanilla romana
1 gota limón
1 gota geranio

Añadir a 10 ml de aceite o crema de masaje.

Mezcla Masaje o Baño Fiebre del heno

2 gotas manzanilla romana
2 gotas limón
1 gota lavanda
Añadir a 10 ml de aceite o crema de masaje.

Bálsamo o crema para fiebre del heno

5 gotas eucalipto radiata
3 gotas pino silvestre

Añadir a 15 ml de crema base o ungüento y aplicar según sea necesario.

Sinergia para inhalador personal Stop estornudos

3 gotas siempreviva (Helycrhrisum italicum)
10 gotas tanaceto (Tanacetum annum)
2 gotas niaouli (Melaleuca quinquenervia)

Añadir al algodón del inhalador personal y usar según sea necesario.

Referencias

• WebMD https://www.webmd.com/allergies/hay-fever-allergy
• https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/allergies/symptoms-causes/syc-20351497
• https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/enfermedades/alergia-polen