· Descubre el Hidrolato de Aciano ·
El Aciano, la flor cian
El aciano es una planta herbácea que florece durante los meses de mayo a septiembre y es originaria de Europa. Crece en los campos de cereales, pero también en bosques y caminos. Desde la antigüedad se conoce a esta cerúlea flor, pero no le prestaron especial atención hasta llegado el siglo XVI cuando un botánico llamado Mattioli afirmó que estas flores desinflamaban los ojos rojizos.
Propiedades tradicionales
– Colirio, antiinflamatorio ocular.
– Antirojeces, reduce las rojeces de la piel.
– Refresca e hidrata pieles sensibles y secas.
– Antiséptico.
– Fragilidad capilar.
Propiedades emocionales
A lo largo de la Historia, se ha representado para simbolizar la sensibilidad, dulzura, lealtad y fiabilidad, como en «El Nacimiento de Venus», de Boticelli. También en la mitología griega se describe cuando Aquiles fue herido con una flecha envenenada (por Heracles) y su herida fue curada aplicando plantas de aciano por el centauro Quirón. De ahí su nombre «Centaurea», ya que en la antigua Grecia se consideraba que los centauros eran conocedores de los usos de las plantas medicinales.
Estabilidad, pH y precauciones
Su shelf-life varia de 12 a 18 meses dependiendo de su modo de almacenamiento. Se recomienda almacenar en un lugar fresco bien cerrado y alejado de fuentes de calor y de la incidencia solar directa. Preferentemente almacenar en el frigorífico.
– pH: 4,7- 5.0
El hidrolato de aciano se considera seguro para su uso.
Los hidrolatos son la parte acuosa resultante de la destilación al vapor de hierbas, plantas y flores. Son suspensiones coloidales de aceites esenciales, ácidos orgánicos y otros componentes vegetales que constituyen un producto importante de la destilación junto con el aceite esencial.
Los hidrolatos son aguas purificadas (ya que son sometidas a altas temperaturas en la destilación) que contienen alrededor de un 10% de los aceites esenciales destilados. Debido a que contiene mas ácidos vegetales que los aceites esenciales, son muy adecuados para su uso sobre la piel, no necesitando ser diluidos para su aplicación.
Los hidrolatos humidifican la piel y la preparan para el cuidado facial, por lo que son comúnmente utilizados como tónicos y pueden ser mezclados entre sí o con otros ingredientes, como por ejemplo extractos. Su pH es similar al de la piel (5-6) siendo ideales para el cuidado de la piel del bebé.
Los hidrolatos tonifican, refrescan, despiertan, regeneran, hidratan, reafirman, oxigenan y regulan la producción sebácea de la piel. Además, poseen las propiedades específicas de la planta o flor de la que proceden.